Los mini “dramas” de la vida me llevan irremediablemente a contaros cosas. Primero fue encontrarme con una mampara fija de ducha de la que se salía el agua (el contador en este tiempo ha subido a dos) y ahora nos toca otro. Fui a una boda, pero tranqui, nadie se interpuso a la unión. En cambio alguien me manchó de vino. “Hasta luego al vestido” pensé. Pero no, eso me llevó a descubrir cómo limpiar una mancha de vino tinto seca y sin frotar, ¡dos por uno!
Y dirás, “pero, mujer, ¿por qué te dejas secar una mancha de vino tinto?”. Primero porque la boda era fuera de mi ciudad y segundo porque cuando llegué a la tintorería me mandaron salir por donde había venido. En el momento en el que lo vieron me dijeron que si les dejaba el vestido, se lo dejara sabiendo que muy seguramente se estropearía. ¿Para qué pagar por romper algo cuando lo puedo romper yo sola gratis?
La historia ha tenido final feliz: ni rompí el vestido, ni tuve que frotar, ni me gasté mucho dinero. Así que, estando tan feliz como estoy con el resultado, te cuento cómo limpiar una mancha de vino tinto seca aunque en la tintorería te manden a la porra.
Cómo limpiar una mancha de vino tinto seca
Solo necesitas tres sencillas cosas para limpiar vino tinto de la ropa, del mantel o de donde tercie: un barreño, agua caliente y el complemento que ahora no falta en mi despensa, el percarbonato.
Igual tú ya lo conoces y no te descubro nada del otro mundo, pero deduzco que si me has encontrado hablando de esto puede que no lo conozcas, y que estés a punto de descubrir que es alucinante. Luego te cuento para qué más lo uso, pero lo primero:
- Llena el barreño de agua caliente, del grifo a mí me vale, disuelve en ese agua una o dos cucharadas soperas de percarbonato y mete dentro la ropa con la mancha de vino.
- Deja que repose ahí unos 30 minutos, cuando salga, deberá estar como nuevo. ¡A mí me funcionó así! Si la mancha es complicada, repite la operación. Después, mételo en la lavadora para aclararlo bien con un programa rápido (aprovecha a meter más cosas que tengas, por favor, que hay que ahorrar).
Otro dato importante es que el vestido era de color naranja y ha salido perfecto, con la misma intensidad con la que entró en el barreño, así que en mi caso, nada de desteñidos.
Así de sencillo es saber cómo limpiar una mancha de vino tinto seca de la ropa con esta mezcla, para mí fue como milagroso. Pero como siempre, no es milagro, es ciencia, así que vamos a conocer el percarbonato.
¿Qué es el percarbonato?
El percarbonato, que NO bicarbonado, es un compuesto químico (fórmula Na2H3CO6 para los entendidos) que también se conoce como percarbonato sódico que se presenta en forma granulada. Necesita agua para poder hacer su “magia” ya que en ese momento se descompone en otras dos cosas: peróxido de hidrógeno, que conocemos todos mejor como agua oxigenada, y carbonato de sodio.
Ya hemos visto en otras ocasiones cómo el agua oxigenada ayuda con las tareas de limpieza, por ejemplo cuando descubrimos cómo limpiar un sofá de tela, pero esto es otro nivel (como veis estoy encantada).
¿Dónde comprar percarbonato sódico?
No te costará encontrarlo, en los supermercados lo tienen en la zona de limpieza. En el que yo lo compré viene con el nombre de “blanqueador”, solo asegúrate leyendo la etiqueta de que sea este producto y que venga granulado, es lo que buscamos.
En definitiva, además de valernos para saber cómo limpiar una mancha de vino tinto seca de la ropa, también nos vale como detergente. Por eso mismo se llama blanqueador. Aprovechando que lo tenía por casa lo he usado para quitar las manchas amarillas de las camisetas blancas, entre el sudor y los desodorantes imaginad el desastre. Pues de nuevo ¡salieron sin frotar! Además, muchas tenían estampado y no se ha desteñido nada.
En resumen, ya sabes cómo limpiar una mancha de vino tinto, si en cualquier celebración cae al mantel o a la ropa, ya no te disgustará tanto este pequeño y común accidente. No seré yo quien diga nada negativo del jabón de pueblo de toda la vida, pero con ese toca frotarlas y con el percarbonato no, así que, +1 para mi nuevo aliado. Ojalá te ayude tanto como a mí, si es así, ¡me alegro!