Para muchos de nosotros el teletrabajo llegó para quedarse y, si es tu caso, sabrás de la importancia de contar en tu hogar con una buena conexión a internet, una silla ergonómica y una buena rutina de horarios entre otras muchas cosas. Si esto de tener que acondicionar el espacio para el home office te ha pillado por sorpresa, quieres darle un cambio de estilo o bien deseas crear ahora de cero tu propio rincón, hoy te quiero contar cómo lograr un despacho minimalista en el salón.
Claves para conseguir un despacho minimalista en el salón
Escoge el espacio adecuado
Esto va a depender en gran medida de la forma que tenga tu salón, como ya bien sabes, no es lo mismo decorar un salón alargado que un salón cuadrado. Cuenta con dejar zonas de paso, de disponer de una zona tranquila, preferiblemente alejada de distracciones y, si puede ser, cerca de una ventana.
Mesa de escritorio minimalista
Tendrás que pensar en que la mesa encaje estéticamente hablando con el resto del mobiliario y, además, que cuente con las medidas suficientes para dejarte trabajar. Estas pueden oscilar, siendo común encontrar escritorios con medidas de 120-130 cm de ancho, aunque puedes reducirlo sin problema. En cuanto al fondo pueden ser de 60 – 90 cm y la altura varía entre los 70-75 cm.
En cualquier caso, recuerda que siempre puedes solicitar muebles a medida para que se adapten a las necesidades de tu nuevo despacho minimalista en el salón.
Silla ergonómica
Desde luego que la elección de una buena silla la tendremos que ajustar a nuestro bolsillo, pero aunque siempre os digo trucos para ahorrar, en el caso de las sillas de oficina, es mejor no escatimar. Nuestra comodidad es esencial y, no solo eso, tener una buena postura durante nuestra jornada laboral, ya sea en casa o en una oficina, nos alejará de los temidos dolores de espalda.
Estos dolores de espalda, así como de cuello y hombros pueden desencadenar problemas más serios tanto a corto como a largo plazo. Por lo tanto, apostar por una silla ergonómica nos mantendrá alejados del fisioterapeuta. En este sentido, una buena silla de escritorio debe ser regulable y, cuanto más, suele ser mejor: altura, profundidad de asiento, apoyo lumbar y cervical, reposabrazos ajustables en altura y que se puedan rotar… Si a eso le sumas un asiento con una espuma firme pero que sea cómoda y se adapte a nuestro cuerpo y que además se pueda reclinar, estarás apostando por un buen modelo.
Iluminación adecuada
Antes os decía lo de poner el escritorio cerca de la ventana por algo. La iluminación es esencial para nuestra salud visual. Aprovecha la luz natural siempre que sea posible e instala una lámpara de escritorio moderna y minimalista para facilitarte el trabajo. También es buena idea que la intensidad sea ajustable, así podrás adaptarla a diferentes horas del día.
Organización ante todo
¿Cómo vamos a tener un espacio minimalista desordenado? Primero, recuerda siempre que en este estilo decorativo menos es más. Segundo, utiliza sistemas de almacenamiento discretos, como estantes flotantes o cajones escondidos en el escritorio. Evita especialmente el desorden visual sobre el propio escritorio y mantén a la vista solo lo esencial.
Esconde los cables
Poca cosa hay que me ponga más nerviosa que los líos de cables. Ahora encontrarás por muy poco dinero organizadores que te sirven para pegar tras el mobiliario y tenerlos bien escondidos y a buen recaudo. Si quieres decorar un despacho minimalista en el salón, ¡esconde los cables!
Y, como siempre, recuerda tener recogido el espacio. A nadie le gusta llegar a casa y encontrar un desorden y piensa que tu despacho será tu casa y viceversa. Deberás saber dividir muy bien tus tiempos y separar ocio de trabajo y con eso, y un despacho minimalista en el salón, disfrutarás de tu home office como nunca antes.