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¿Merece la pena quitar el gotelé? Pros, contras y alternativas (+Infografía)

Contenidos en esta entrada:

El gotelé ha sido una técnica decorativa muy utilizada en las paredes de los hogares españoles durante décadas, especialmente en los años 80 y 90. Sin embargo, en los últimos años, las tendencias en decoración de interiores han cambiado, y el acabado liso ha ganado protagonismo. Si estás considerando renovar las paredes de tu hogar, es posible que te preguntes si realmente merece la pena quitar el gotelé. 

¿Qué es el gotelé y por qué fue tan popular?

El gotelé es una técnica de pintura que consiste en aplicar gotas gruesas de pintura sobre la pared, creando una textura rugosa y tridimensional. Se aplicaba en casas y edificios de todo tipo debido a su capacidad para esconder grietas, bultos y otros defectos. Además, era una opción económica, lo que hizo que se volviera aún más importante durante la construcción masiva en España en las décadas mencionadas.

Sin embargo, con la evolución de las tendencias decorativas, el estilo minimalista y las superficies lisas han ganado preferencia, relegando al gotelé a un segundo plano.

¿Merece la pena quitar el gotelé?

Ventajas de eliminar el gotelé

Modernización del espacio

Las paredes lisas ofrecen una apariencia más moderna y elegante, lo que puede transformar completamente la percepción de tu hogar. Además, se adaptan mejor a los estilos decorativos contemporáneos, como el nórdico, el industrial o el minimalista.

Mayor versatilidad en decoración

Al quitar el gotelé de la pared tienes más libertad para experimentar con diferentes tipos de decoración. Papeles pintados, vinilos decorativos o incluso la posibilidad de pintar con técnicas más sofisticadas, como el degradado o el esponjado, son algunas de las opciones que se ven limitadas por la presencia del gotelé.

Facilita el mantenimiento

Otro aspecto por el que merece la pena quitar el gotelé es que, a diferencia de las paredes con textura, las paredes lisas son mucho más fáciles de limpiar y mantener. En una superficie rugosa, el polvo y la suciedad pueden acumularse en las hendiduras, lo que hace que sea más difícil mantenerlas impecables.

Aporta amplitud visual

Las paredes lisas suelen hacer que los espacios pequeños parezcan más grandes. Al eliminar el gotelé, puedes generar una sensación de mayor amplitud y luminosidad en habitaciones más pequeñas o con poca luz natural.

Incremento del valor de la vivienda

Un acabado actualizado y acorde a las tendencias actuales puede aumentar el atractivo de tu vivienda en caso de que decidas venderla o alquilarla. Si es lo que estás pensado, te recomiendo conocer algunos consejos sobre el home staging.

Desventajas de quitar el gotelé

Proceso costoso y laborioso

El primer contra por el que no merece la pena quitar el gotelé es que no es un trabajo sencillo. Requiere de tiempo, esfuerzo y, en muchos casos, la ayuda de profesionales. Lijar, alisar y volver a pintar las paredes puede ser un proceso largo y costoso. Además, si el gotelé se ha aplicado con pintura plástica, la tarea es aún más difícil, ya que esta pintura no absorbe bien los productos que se utilizan para eliminar el gotelé.

Puede descubrir imperfecciones

Como he comentado antes, en muchos casos, el gotelé se aplicaba precisamente para ocultar defectos estructurales en las paredes, como grietas o desniveles. Al eliminarlo, es posible que tengas que reparar estas imperfecciones antes de dejar la superficie completamente lisa.

Inconvenientes temporales

Durante el proceso de eliminación del gotelé, es probable que tengas que convivir con polvo, ruido y materiales de construcción en casa. Este tipo de reforma puede ser una molestia para quienes viven en la vivienda durante el tiempo que dura la obra.

infografía quitar el gotelé

Alternativas a quitar el gotelé

Si crees que no merece la pena quitar el gotelé, existen soluciones que pueden ayudarte a transformar tus paredes sin necesidad de eliminar completamente esta textura:

1. Pintura cubregotelé

Una de las opciones más sencillas es optar por pinturas cubregotelé, que son productos diseñados específicamente para cubrir superficies texturizadas como el gotelé. Esta pintura contiene una mayor cantidad de componentes sólidos, lo que permite rellenar las pequeñas imperfecciones de la pared, “alisando” en cierto modo el acabado sin necesidad de lijar o raspar.

Aunque esta solución no deja las paredes completamente lisas, reduce significativamente la textura, proporcionando una apariencia más moderna con menos esfuerzo.

pared texturizada

2. Colocación de paneles de yeso (pladur)

Otra opción bastante frecuente es cubrir las paredes con pladur o paneles de yeso. Este material es fácil de instalar y te permitirá obtener paredes completamente lisas. Simplemente se coloca el panel sobre la pared existente, ocultando la textura por completo.

Es una solución práctica si no quieres lidiar con la suciedad del proceso de eliminación del gotelé, pero puede reducir ligeramente el tamaño de la habitación, ya que los paneles añaden grosor a las paredes.

3. Paredes decorativas con revestimientos

Si prefieres mantener un toque de textura, pero no te gusta el gotelé, puedes considerar aplicar revestimientos decorativos. Los paneles de madera, azulejos o incluso piedra decorativa pueden dar un toque único y elegante a las paredes sin necesidad de alisar toda la superficie.

Esta es una excelente opción si buscas darle a una o más paredes un enfoque estético distinto, mientras dejas otras partes de la casa con el acabado original.

Sala moderna sin gotelé

4. Aplicación de microcemento

El microcemento es una opción moderna que puede aplicarse sobre el gotelé para crear una superficie lisa y resistente. Es ideal para espacios como cocinas y baños, donde se busca funcionalidad y estilo.

5. Papel pintado o vinilos gruesos

Algunos tipos de papel pintado de alta calidad pueden aplicarse directamente sobre el gotelé, especialmente si la textura no es demasiado pronunciada.

¿Cómo quitar el gotelé paso a paso? (Breves indicaciones)

Si después de considerar todas las alternativas decides que merece la pena quitar el gotelé, te cuento con esta guía básica el proceso de este trabajo:

1. Identificar el tipo de gotelé

Lo primero que debes hacer es determinar si el gotelé es al temple o con pintura plástica. El gotelé al temple es más fácil de quitar porque se disuelve con agua, mientras que el gotelé con pintura plástica requiere un proceso más arduo, que involucra lijado o productos específicos para decapar.

2. Humedecer la pared (solo para gotelé al temple)

Si el gotelé es al temple, puedes comenzar humedeciendo la pared con agua y una esponja o pulverizador. Espera unos minutos para que la humedad penetre en la pintura y luego utiliza una espátula para ir retirando el material con cuidado.

3. Lijar la superficie

Una vez eliminado el grosor del gotelé, será necesario lijar la superficie para dejarla completamente lisa. Esto puede generar mucho polvo, por lo que te recomendamos cubrir los muebles y suelos, así como utilizar gafas y mascarilla protectora.

4. Alisar y enmasillar

Después de lijar, es probable que queden pequeñas imperfecciones o grietas. Aplica una capa de masilla o yeso para rellenar estos defectos y deja secar bien antes de proceder al lijado final. El objetivo es dejar la pared totalmente lisa.

5. Pintar

Finalmente, una vez que la pared esté completamente lisa, puedes proceder a pintar con el color de tu elección. Recuerda que, para lograr un acabado perfecto, es recomendable aplicar al menos dos capas de pintura.

¿Cuánto cuesta quitar el gotelé?

Si te has decidido y crees que te merece la pena quitar el gotelé, seguramente ahora estés pensando en tu bolsillo. El precio varía según factores como el tamaño de las paredes, el tipo de gotelé y si se contratan profesionales. De media, puede oscilar entre 8 y 15 euros por metro cuadrado.

¿Se puede hacer este trabajo sin ayuda profesional?

Aunque es posible, quitar el gotelé requiere herramientas adecuadas y paciencia. Si no tienes experiencia, contratar a un profesional garantizará un mejor resultado y evitará posibles complicaciones.

¿El gotelé puede volver a ponerse de moda?

Creo que nadie tiene la respuesta definitiva a esto. El diseño de interiores es cíclico y las modas tienden a regresar, como le ha ocurrido al terrazo, no obstante, ahora mismo el gotelé se considera, en su mayoría, un estilo anticuado. De todos modos, como siempre digo, ¡para gustos colores!

Entonces… ¿Merece la pena quitar el gotelé?

En definitiva, quitar el gotelé es excelente si estás buscando modernizar tu hogar, aumentar su valor de mercado o mejorar la estética de tus paredes. Sin embargo, el proceso puede ser complicado, costoso y tedioso. Antes de tomar la decisión, es importante que valores si realmente te compensa el esfuerzo o si prefieres alguna de las alternativas, como cubrir las paredes con pladur o revestimientos decorativos.

Sea cual sea la opción que elijas, lo importante es que te sientas cómodo con el resultado final y que tu hogar refleje tu estilo personal. Si decides eliminar el gotelé, es recomendable que consultes con un profesional para asegurarte de que el trabajo se realice de manera eficiente y con los mejores resultados.

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