Con la llegada del calor, aquellos que son afortunados de tener una piscina en su hogar seguramente estén pensando en prepararla para el verano. Si tienes la piscina tapada durante el invierno y has mantenido los cuidados, seguro que no tienes mucha tarea por delante. Si no es así, es necesario trabajar un poco y saber cómo limpiar una piscina vacía. Es importante destacar que esta tarea debe realizarse una vez que se ha vaciado el agua sucia del año anterior y antes de llenarla nuevamente.
Existen diferentes métodos para limpiar una piscina, porque también dependerá del tipo de material, pero ya tengas una piscina con cascada o bien una piscina mini de obra tendrás que adecentarla para disfrutar el verano. La forma en la que yo suelo limpiarla no necesariamente es la mejor o la más adecuada, pero es la que ha funcionado mejor para mí. Si tienes algún método alternativo que te funcione mejor, ¡no dudes en compartirlo en los comentarios!
¿Qué necesito para limpiar una piscina vacía?
A la hora de saber cómo limpiar una piscina vacía de manera eficiente es necesario prestar atención a dos elementos clave: la desinfección y la limpieza. Para llevar a cabo estas tareas, necesitarás los siguientes elementos:
- Lejía: hay que diluir la mezcla en una parte de lejía y diez de agua, ajustando la cantidad en función del tamaño de la piscina.
- Un vaporizador o difusor para aplicar la mezcla en las paredes de la piscina.
- Un cepillo de nylon para frotar y distribuir la mezcla desinfectante en las zonas en las que sea necesario.
- Una hidrolimpiadora, que te facilitará enormemente la tarea.
Es importante que elijas una hora del día adecuada para realizar esta tarea, evitando las horas de más calor. Además, asegúrate de llevar ropa y gafas de protección para evitar cualquier posible contacto con la mezcla desinfectante. Opcionalmente puedes llevar unas botas de agua para evitar resbalones y mantener tus pies secos.
Además, recuerda mantenerte hidratado y usar crema solar, ¡que luego vienen los disgustos!
En mi experiencia, el uso de una hidrolimpiadora es fundamental para lograr resultados espectaculares en la limpieza de una piscina vacía y además en el menor tiempo posible. Es una herramienta rápida, eficiente y que te ahorrará mucho esfuerzo, si tienes piscina es maravillosa, pero también si tienes jardín.
Cómo limpiar una piscina vacía: pasos a seguir
1. La desinfección de las paredes
Para limpiar una piscina vacía, lo primero que debes hacer es mezclar lejía y agua en una proporción adecuada. Una vez que tengas la mezcla, esparce la solución de manera uniforme en todas las paredes de la piscina. Es probable que las paredes estén cubiertas de algas y otros desechos, ya que el agua ha estado estancada durante el invierno.
Si encuentras alguna zona que se resista a la limpieza debido a su gran suciedad usa un cepillo de fibras de nylon para frotar y distribuir la solución por toda la superficie. Debes tener cuidado de no dañar la superficie mientras limpias, así que asegúrate de no ejercer demasiada presión o de si los materiales son adecuados para el material de tu piscina, pileta o alberca, como la quieras llamar.
2. El aclarado de las paredes
El siguiente paso para saber cómo limpiar una piscina vacía es el enjuague de las paredes. De esta manera, se evitará que la lejía salga despedida en todas direcciones cuando se empiece a aplicar presión en la limpieza. Rocía agua con baja presión sobre las paredes para ir eliminando la lejía y los primeros restos de suciedad de los azulejos.
Ten cuidado con el suelo, ya que puedes estar llevando la suciedad hacia el lugar donde acabas de drenar toda el agua y la suciedad acumulada. Además, es importante tener precaución para evitar resbalones, ya que no queremos que ocurran accidentes caseros.
3. La limpieza de las paredes
Ahora es el momento de sacar la hidrolimpiadora y ponerla en acción. Conéctala y empieza a limpiar las paredes manteniéndote a una distancia segura, adecuada a la presión de la máquina. Es importante no acercarse demasiado, ya que el objetivo es eliminar la suciedad, no dañar la superficie.
En pocos minutos verás cómo la suciedad se desprende fácilmente con solo un par de pasadas. Una vez que las paredes estén limpias, repite el mismo proceso con el suelo. Ya no más frotar ni horas perdidas limpiando la piscina. Con este método, la limpieza es rápida, sencilla y eficaz, como debería ser toda tarea de limpieza, ¿no te parece?
Cuando te digo que es el método que me funciona a mí es porque es verdad, ¡mira el resultado!

Si tú también tienes tu propia técnica sobre cómo limpiar una piscina vacía, no dudes en compartirlo en comentarios porque estoy segura de que todos agradecemos unos buenos tips de limpieza. Luego, solo tendrás que mantener el agua de la piscina clara, pegarte un chapuzón y disfrutar del verano como te mereces, ¡al agua patos!